↻↻↻El efecto boomerang↺↺↺
Hoy he calificado a esta entrada como "El efecto boomerang" para hablaros de que el hacer feliz a la gente te devuelve una felicidad inmensa. Si no lo habéis probado, deberíais. ¿Hay algo mejor que intentar que la gente sonría sin pedir nada a cambio en vez de meterse en vidas ajenas a inventarse cosas que carecen de sentido alguno?
Y si bien hacer feliz a la gente hace feliz a uno mismo, hacer infeliz a la gente hará que algún día recibas de tu propia medicina. No sé si creo en el Karma o en que la vida pone a cada uno en su lugar, pero si hay algo claro es que no deberíamos hacer lo que no nos gusta que nos hagan, ya lo dice el refrán.
Dicho esto añadiré que lo payaso que puedo llegar a ser por las redes sociales me sale barato. Con notar que a una sola persona en el mundo le he podido sacar una sonrisa en algún momento, a mi me es suficiente para seguir haciendo el imbécil.
Una vez en una cabalgata de reyes cogí un montón de caramelos y oí como un niño le decía a su madre:
- Mamá, ¡No me da tiempo a coger ningún caramelo!
Ver los ojos de aquel niño empañados en lágrimas como si del sueño de su vida se tratase, me hizo pensar. Le di todos los caramelos que había cogido, y ver su cara de felicidad ante un acto tan sencillo hizo que yo decidiera querer viendo o intuyendo esas caras en la gente.
El levantarte del asiento del metro para que se ponga una persona que necesita sentarse más que nosotros. Que sonría y te de las gracias sin necesidad de hacerlo. Lo hacen porque aunque parezca increíble no es muy común y me da pena que no lo sea. Debería ser una obligación.
Y varias cosas que he hecho y he sacado una sonrisa que no debería salir porque deberían ser normales, pero así es esto. Nada de lo mencionado ni de lo que he dejado por mencionar tiene mérito, cosas sencillas que no cuesta nada hacer, pero mi fin es que entendáis lo bonito que es sacar una sonrisa incluso a personas que no conoces de nada.
Y si bien hacer feliz a la gente hace feliz a uno mismo, hacer infeliz a la gente hará que algún día recibas de tu propia medicina. No sé si creo en el Karma o en que la vida pone a cada uno en su lugar, pero si hay algo claro es que no deberíamos hacer lo que no nos gusta que nos hagan, ya lo dice el refrán.
Dicho esto añadiré que lo payaso que puedo llegar a ser por las redes sociales me sale barato. Con notar que a una sola persona en el mundo le he podido sacar una sonrisa en algún momento, a mi me es suficiente para seguir haciendo el imbécil.
Una vez en una cabalgata de reyes cogí un montón de caramelos y oí como un niño le decía a su madre:
- Mamá, ¡No me da tiempo a coger ningún caramelo!
Ver los ojos de aquel niño empañados en lágrimas como si del sueño de su vida se tratase, me hizo pensar. Le di todos los caramelos que había cogido, y ver su cara de felicidad ante un acto tan sencillo hizo que yo decidiera querer viendo o intuyendo esas caras en la gente.
El levantarte del asiento del metro para que se ponga una persona que necesita sentarse más que nosotros. Que sonría y te de las gracias sin necesidad de hacerlo. Lo hacen porque aunque parezca increíble no es muy común y me da pena que no lo sea. Debería ser una obligación.
Y varias cosas que he hecho y he sacado una sonrisa que no debería salir porque deberían ser normales, pero así es esto. Nada de lo mencionado ni de lo que he dejado por mencionar tiene mérito, cosas sencillas que no cuesta nada hacer, pero mi fin es que entendáis lo bonito que es sacar una sonrisa incluso a personas que no conoces de nada.
"Si hacer el gilipollas provoca que alguien sonría, vivan los gilipollas" S.F.
Comentarios
Publicar un comentario