El arte de los mensajes subliminales

Si algo hay bonito en la vida a veces es ser ignorante. Cuántas veces veremos mensajes subliminales, intencionados o no, en las marcas de lo que nos anuncian. Lo gracioso de todo es que no nos damos cuenta. ¿Piensa mal y acertarás?
Vamos con ellos:

1.- Ese insulto de cuando salías al parque a jugar a las canicas que te hacía parecer superior "Carapolla", se comenta que se lo dijeron un día a Calamardo y estuvo 72 horas llorando.

2.- Parece ser que Minnie tuvo que recurrir a un Sex Shop, debido a que Mickey Mouse no tiene pene.

3.- Aquí llegamos a un mensaje subliminal que es uno de los pocos que en mi opinión es pura casualidad, pero aún así no me extrañaría que no lo fuera. Si cometiese ese delito, al menos tendría más probabilidades de jugar el chaval, las cosas como son.

4.- Lo normal. Igual te estás tomando una copita que frotándote las partes nobles, vete tú a saber.

5.- El camello de Camel. Qué sería de él sin un niño meándole encima de una pata.

6.- Si hubiese un tutorial de: "Cómo ser mensaje subliminal", esta imagen sería el modelo a seguir. Yo en la vida me habría imaginado algo similar, ni se me habría pasado por la cabeza. Pero ole los cojones de quien tiene tanta imaginación para descubrirnos este tipo de mensajes.

7.- Esta última interpretadla como queráis, pero esto es pederastia en toda regla. El título lo podemos interpretar como "El hombre del rifle" o "El fusilero", aquí cada uno que se haga su propia película, lo que está claro es que ambos están muy felices. Me hubiese gustado saber si el hombre era igual de feliz cuando vio la portada acabada.

Normalmente, este tipo de cosas se suele hacer para dar publicidad a algo. Puede que algún día lo haga yo para publicitar mi blog, todo puede pasar. Estad muy atentos a la publicidad, que en cualquier anuncio os encontráis alguna guarrada fugaz.

 

"Prefiero ser ignorante y aprender cada día, que ser tonto y no querer hacerlo"  S.F.